El supuesto gulag para homosexuales de Chechenia forma parte de la guerra psicológica

rusiagayLa represión contra los homosexuales en Chechenia ha llenado los noticiarios de los medios de comunicación en todo el mundo. Es un dardo directo contra Rusia y un intento – otro más – de desestabilizar sus fronteras en una región tan sensible como el Cáucaso, además de una continuación de la anterior campaña de 2013 contra la persecución de los homosexuales en la propia Rusia.

La embajadora de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, ha aprovechado para poner el grito en el cielo y en las principales capitales imperialistas se han sucedido las manifestaciones frente a las embajadas rusas, como sucedió el pasado viernes en Madrid, que han tenido un efecto multiplicador de la denuncia. Los movimiento LGTB que están dopados y subsidiados por los imperialistas se han sumado a la campaña como buenos mercenarios que son.

El portavoz oficioso de la CIA, el diario «The Washington Post», publicó una entrevista con la periodista Elena Milashina, condecorada en 2013 con el Premio Internacional «Mujer Coraje» que otorga el Departamento de Estado de EEUU a (casi) todos aquellos que defienden los derechos humanos (según y cómo). Es el colmo del periodismo: los periodistas entrevistando a otros periodistas.

La campaña no puede cuadrar mejor contra el gobierno de un país islámico como Chechenia, sacudido a su vez desde hace muchos años por el terror yihadista. ¿Qué se puede esperar de los islamistas, de unos u otros? Algunos cretinos llegaron a hablar de gulag, de purgas, de prisiones secretas, de torturas, de otro Guantánamo y de que se había emprendido una «yihad» en el Cáucaso contra los homosexuales.

Todo tuvo su origen en un artículo publicado el 1 de abril en el diario de la oposición rusa «Novaya Gazteta» en el que se hablaba de una represión «masiva» contra los homosexuales en Chechenia. Se hablaba de 100 detenidos y 3 muertos. Un bocado así tuvo un eco inmediato en los medios de siempre, desde el diario vasco «Deia» hasta la CNN, pasando por los medios «progres», que fue seguido de declaraciones indignadas de los políticos por ese tipo de situaciones que sólo ocurren en países como Rusia.

El portavoz del Gobierno checheno desmintió la información rotundamente y Nikolai Lilin publicó un vídeo en su muro de Facebook en el que desautorizaba la campaña. Pero, como en el bombardeo de Siria, nadie pidió explicaciones, nadie realizó la más mínima comprobación de la noticia porque era funcional a lo que pretende el imperialismo.

Ahora la organización «Gay Russia» ha puesto una querella contra NG por difamación y ocurre lo de siempre: a pesar de que la iniciativa procede de grupos homosexuales, tampoco nos han informado de ella porque se hubieran tenido que desmentir a sí mismos, ya que la campaña previa que habían orquestado era falsa, como no podía ser de otra forma.

FUENTE: «Movimiento Político de Resistencia»

Deja un comentario